VISITA A LA CIUDAD DE OSLO
A la mañana siguiente, el barco comenzó a navegar por el fiordo de Oslo, según se iba aproximando al puerto, la ciudad nos dio la bienvenida con un sol radiante. En las laderas vimos casas de vivos colores, playas llenas de personas aprovechando el magnífico día y hasta un viejo faro, reconvertido hoy en restaurante.
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Paisaje llegando a Oslo |
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El viejo faro |
Oslo, capital de Noruega, fue fundada sobre el año 1000, en el año 1100 se convertiría en obispado. En el año 1536 pasa a ser una provincia danesa, conocida con el nombre de Christinia en 1624 en honor al rey danés Christian IV. En 1814 se disuelve su unión con Dinamarca y se une con Suecia. Ya en el siglo XX, en 1905 consigue la independencia y Haakon VII es coronado rey. En 1925 la ciudad recupera su denominación original, Oslo.
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Vistas de Oslo desde la fortaleza de Akershus |
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Dentro de la fortaleza |
Justo a la salida de la terminal de cruceros, se encuentra el
Castillo Fortaleza de Akershus, es uno de los edificios más antiguos de la ciudad, se construyó como castillo real en la Edad Media a finales del siglo XIII, por su situación estratégica junto al fiordo. Forma parte del patrimonio histórico de Noruega, a día de hoy mantiene funciones militares. Desde sus miradores se tienen unas bonitas vistas de la ciudad y del fiordo.
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Ali con el guardia real que se acercó para salir en la foto |
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Ayuntamiento con el mural y la escalera |
De camino al Ayuntamiento, nos llamó la atención una fuente donde se bañaban unos niños para mitigar el calor. El
Radhuset, Ayuntamiento se comenzó a construir en 1931, pero debido al comienzo de la II Guerra Mundial fue interrumpido y finalmente se inauguró oficialmente el 15 de mayo de 1950. Fue diseñado por Arnstein Arneberg y Magnus Poulson. Es conocido por ser el lugar donde se celebra la entrega anual de los Premios Nobel. Su exterior es de líneas simples y rectas, compuesto de una estructura principal y dos torres. En contraste con las líneas austeras del exterior, te encuentras con un interior más bello arquitectónicamente, así un hall presidido por un impresionante mural y una escalinata que en su inicio está adornada con una vitrina que contiene una campana y que conecta el hall con la planta superior. En esta planta accedimos a varias dependencias, así el salón de plenos, el de reuniones, ambas separadas por un pasillo con vitrinas en la que se exhiben los regalos con los que han obsequiado diferentes mandatarios a la ciudad de Oslo.
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Salón en el interior del Ayuntamiento |
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Vitrina con regalos obsequiados a la ciudad de Oslo |
Salimos por la calle Roald Am, donde se encuentra la oficina de turismo, aprovechamos para entrar y hacernos con un plano de la ciudad. La oficina cuenta con wiffi gratuíto. Llegamos a la Plaza Spikersuppa, presidida por una bella fuente y con las esculturas de dos ositos panda.
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En la plaza Spikersuppa |
Al lado de la plaza está el
Stortinget, Parlamento, fue diseñado por el arquitecto Victor Langlet en 1866. El parlamento es unicameral, pero está dividido en dos departamentos en asuntos legislativos.
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El Parlamento |
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Ali haciendo migas con un troll |
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La Catedral |
Seguimos por la calle principal de Oslo, Karl Johans Gate, siempre animada, es un eje peatonal y comercial con numerosos cafés con terrazas y precios que casi quintuplican los existentes en España y tiendas de primeras marcas, hasta llegar a la
Domkirken, Catedral
www.oslodomkirke.no/artikler/1183/oslo-cathedral/.Estaba rodeada de un impresionante manto de flores, velas y banderitas de Noruega en homenaje a las víctimas del reciente atentado terroristas. En medio de una gran emoción accedimos al Templo, fue construída en la segunda mitad del siglo XVII y consagrada en 1697. Es de estilo barroco con planta de cruz latina y construída en ladrillo. Reemplazó a la Catedral de la Trinidad destruída por un incendio. Su interior es acogedor y con la madera como protagonista en sus materiales, algo que se repetiría en todas las iglesias de Noruega que visitaríamos posteriormente.
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Manto de flores rodeando la Catedral |
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Interior de la Catedral |
Continuamos la ruta, caminando nuevamente por Karl Johans gate, en su recorrido llegamos a
Stortings Plass, una alegre plaza con bonitos edificios y cafés con terraza. Más adelante se encuentra el edificio de la
Universidad, hoy en día alberga la Facultad de Derecho, edificio noeclásico, del siglo XIX.
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Karl Johans gate |
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Stortings Plass |
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Universidad |
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Estatua del dramaturgo Ludvig Holberg |
Enfrente de la Universidad está el
Teatro Nacional, de estilo neoclásico, fue diseñado por Henrik Bull y lo que destaca en su exterior es una escultura del dramaturgo Ludvig Holberg, creador de la comedia noruego - danesa. Al lado del teatro, hay una fuente cuyos chorros de agua adoptan la forma de cola de pavo real y que llamó nuestra atención por su originalidad. Es una constante que se repite en toda la ciudad, adornar cada rincón con una escultura o una fuente y que le dan ese aire especial a la ciudad.
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Ali sentada junto a la fuente con forma de cola de pavo real |
Llegamos a otro de los puntos de interés de Oslo, el
Palacio Real www.kongehuset.no/c27322/seksjonstekst/vis.html?tid=28697 , fue obra del arquitecto Hans Linston entre 1823 y 1848, consta de tres alturas y actualmente es utilizado por la familia real como lugar de trabajo y no de residencia. El palacio está rodeado de un bello entorno de jardines y que en esos momentos, aprovechando el buen tiempo, era aprovechado por mucha gente para tomar el sol, tumbados en el cesped.
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El Palacio Real |
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Jardines que rodean el Palacio Real |
A treinta minutos caminando desde el Palacio Real, está el famoso
Parque de Esculturas de Vigeland www.vigeland.museum.no/en/vigeland-park, para llegar a él también se puede tomar el tranvía 12 o 15. En el camino vimos en la distancia la estación de saltos de esquí de Holmekollen, con su famoso trampolín. El parque fue diseñado por Gustav Vigeland, consta de amplios jardines y doscientas doce esculturas realizadas entre 1906 y 1942.
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Ali en el parque Vigeland |
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Al fondo el Monolito |
De las numerosas esculturas que se exhiben en el Parque, destacan el Monolito, bloque de granito de diecisiete metros de altura, con ciento veintiun cuerpos humanos desnudos y entrelazados, hombres, mujeres, ancianos y niños. Otro conjunto escultórico destacable es la Rueda de la vida, nuevamente figuras humanas se entrelazan formando un círculo.
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Rueda de la vida |
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Detalle de las figuras humanas del Monolito |
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Mirador del parque Vigeland |
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Con el niño de la rabieta |
En el puente que atraviesa el parque, junto con más figuras humanas desnudas, nos encontramos con una divertida escultura, el Niño de la Rabieta, la tradición consiste en cogerle la mano izquierda, por lo que el baño que tiene la figura está gastado de tanto tocarla. Después de dar una pequeña vuelta por los jardines del parque, que se encontraban repletos de gente disfrutando del día de sol, dimos por finalizada la visita.
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En un estanque del parque | |
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Vista del Parque Vigeland |
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Casa de madera |
De regreso del Parque de Esculturas de Vigeland hasta el centro, pudimos disfrutar de un agradable paseo que transcurrió por un bello entorno de una zona residencial de Oslo, entre mansiones y alegres casitas de madera. Ya sin tiempo para más, emprendimos el camino hacia la terminal del puerto. Una vez a bordo, desde una de las cubiertas del barco, vimos la
Opera www.operaen.no/Default.aspx?ID=29002, bella construcción en mármol blanco de Carrara y vidrio, fue diseñada por Snohetta e inaugurada en el año 2008.
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La Ópera |
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Despidiéndonos de Oslo con la fortaleza de Akershus |
Nos despedimos de la ciudad de Oslo, muy contentos con la visita realizada, porque era una de las escalas de la que menos esperábamos y que nos sorprendió. Pasear por sus calles tranquilas sin apenas coches, es una delicia. Admirar sus bellos edificios, algunos poco atractivos exteriormente pero mucho más ricos interiormente, como el Ayuntamiento y todos ellos con un denominador común,esos pequeños detalles, una fuente o una escultura que te esperaban en cualquier rincón. Es una ciudad fácil de visitar, porque sus principales atractivos se disponen en torno a Karl Johans Gate y además acompañado de un día de verano espléndido.Todo ello unido al reciente atentado que había sufrido, los cientos de flores que se habían depositado, no sólo en la Catedral, si no en otros puntos de la ciudad y a los que todavía acudían personas a dejar su testimonio. De noche, antes de la cena presenciamos en el teatro Ibiza el espectáculo Giza, sobre la Esfinge.
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Oslo con el Ayuntamiento al fondo |
Al día siguiente, día de navegación, en el desayuno presenciamos una regata de veleros tradicionales que se estaba celebrando muy cerca del barco. Luego y durante todo el día, al estar navegando por el Mar del Norte, vimos desde cubierta varias plataformas petrolíferas, con sus barcos petroleros. Hoy aprovechamos para conocer todos los recobecos del barco, acudimos al gimnasio que estaba situado en proa y desde el cual se tienen unas excepcionales vistas mientras practicas deporte. También, estuvimos en la piscina, aunque el día no acompañó. Ya de noche, fue el coctel de gala del capitán, Antonio Francisco Toledo presentó a los oficiales y jefes de departamento y después el espectáculo Glamour, ambientado en un cabaret.
Qué gracia me ha hecho, tengo una foto igual con el mismo troll, por lo visto es famoso, jejejeje.
ResponderEliminarCuando estuve yo nos llovió un poco y era un poco lata, veo que vosotros tuvisteis buen tiempo. La etapa genial!!! ;-)
Jejeje, a mí también me sonaba ese troll... En alguna otra foto lo he debido ver.
ResponderEliminarMe ha sorprendido para bien la ciudad, me la imaginaba distinta. No era una ciudad que me llamara la atención pero de vuestros relatos se desprende que bien merece una visita.
Un saludo
¡Qué ciudad más bonita y sorpendrente!Me ha encantado y no me esperaba que fuera asi Oslo,además el tiempo os acompañó y engalanó más la ciudad.Me ha impresionado mucho el manto de flores por las victimas del atentado.Me imagino que verlo en vivo tuvo que ser mucho mas impactante y emotivo .
ResponderEliminarMuy símpatico el troll y la escultura del niño de la rabieta, jaja.
Bueno Victor ,espero impaciente ,asi que ponte a escribir ya el siguiente relato.Besos
Hola,
ResponderEliminarGracias a todos por los comentarios.
Babyboom, este troll vaya famoso que se ha hecho, si dentro de poco ya lo tenemos pidiendo derechos de autor...el tiempo que nos hizo en Oslo fue fabuloso.
Helena, la visita a Oslo fue una grata sorpresa, no esperábamos mucho y ya ves nos encantó.
Pury, la visita a la Catedral con el manto de flores rodeándola, fue muy emocionante.
El niño de la rabieta nos hizo mucha gracia, no sé me recordaba un poco a mi de pequeño, jeje.
Ya tengo muy adelantado los siguientes relatos, las ventajas que tienen las vacaciones...
Un beso.
Vaya cambio, cuando estuve nevaba y hacía bastante frío, tenía su encanto pero la ciudad a pleno sol es más chula. Me ha impresionado mucho el manto de flores en la catedral.
ResponderEliminarUn saludo
Hola Carfot,
ResponderEliminarGracias por tu comentario.
Las ciudades son más bonitas con sol y luz, como fue el caso de Oslo cuando lo visitamos.
Saludos.
Hola Victor,
ResponderEliminarMe encanta tu blog. Te sigo desde que lo comenzaste,a raíz de otros blogs quetambién sigo. Es la primera vez que escribo.
Te quería preguntar una cosa. ¿Cuál es el crucero que habéis hecho? La verdad que sólo he visto 2 escalas, y las dos son sitios que tengo pendientes,y pensándolos bien, hacer un crucero como este estaría muy bien.
Seguiré pendiente tus entradas.
Un saludo
Hola Patry,
ResponderEliminarMuchas gracias por tu comentario y bienvenida al blog !!
El nombre del crucero era los mejores fiordos, de iberocruceros. Es una buena opción conocer y disfrutar de los fiordos, navegando en un crucero.
Un saludo.