En la tierra de los vikingos I

17 agosto 2011

VISITA A LA CIUDAD DE COPENHAGUE


Nuestra habitación
   Después de pasar toda la noche en el bus llegamos al aeropuerto de Barajas a primera hora de la mañana para tomar el vuelo que puntualmente nos llevó hasta Copenhague. Después de hacer el check in en el barco Grand Mistral y comer, nos dispusimos a visitar la ciudad. Para ello, después de andar diez minutos desde la terminal de crucero llegamos a la estación de tren de Nordhavn, donde conseguimos, después de varios intentos, comprar los billetes en la máquina automática que se encuentra en el vestíbulo, ésta sólo tiene las instrucciones en danés y un sistema un poco complejo que hace que sacar un billete de tren pueda convertirse en una odisea. Por veinticuatro coronas por persona, dos zonas y después de tomar dos trenes, con transbordo incluído al estar la línea en obra, llegamos a la estación central.


Junto al elefantito con la bandera danesa a la salida de la estación central

    
    Copenhague, la capital de Dinamarca se erige en la costa este de la isla de Selanida, frente al mar Báltico. Los orígenes de la ciudad se remontan al año 800 cuando surge en torno a un pequeño pueblo de pescadores. En el año 1160, el control de la ciudad pasa a manos del obispo Absalon, en los años siguientes la ciudad creció diez veces, se crearon nuevas iglesias y abadías, aumentando la economía diez veces gracias a la pesca del arenque. Empezamos la visita junto a los Jardines de Tívoli,que se encuentran justo enfrente de la estación central en la calle Beunstorffogad y que visitaríamos con tranquilidad el último día. Cuando pasamos junto a la entrada pudimos presenciar un curioso desfile de una banda de música.
Ali junto a la entrada del Tivoli
Banda de música a la entrada del Tivoli



   Cogimos la calle Vesterbrogode que desemboca en Radhuspladsen, la Plaza del Ayuntamiento,con su animación constante y donde se encuentra, presidiéndola, el Ayuntamiento, construído en 1892 y 1905, con formas inspiradas en el renacimiento italiano y escandinavo. Lo más característico del edificio es su fachada de ladrillo rojo, en el centro la escultura del obispo Absalón, figura decisiva en el crecimiento de la ciudad, encima el escudo de la ciudad, rodeado de seis esculturas de guardianes. Remata el edificio la torre, con sus ciento cinco metros de altura.

El Ayuntamiento
Detalle de la fachada, escudo ciudad y esculturas de los guardines

Escultura Obispo Absalon en la fachada


   También en la Plaza del Ayuntamiento y justo en el lado izquierdo del edificio principal se encuentran  los Tañedores de Lur, dos guerreros tocando unos instrumentos musicales de viento, típicos de los países del norte de Europa, son obra de Sigfried Wagnen en 1914.
Los tañedores de lur



   En uno de los lados de la plaza se haya el edificio del Hotel Plaza, presidido por su gran torre con llamativos  mosaicos en cada uno de sus cuatro lados. También otro de los elementos arquitectónicos destacables en el Radhuspladsen es la fuente del Dragón, de principios del siglo XX.
Hotel Plaza



    En los alrededores de la plaza está la Chica del Tiempo, que aparece con paraguas y en bicicleta,justo debajo se encuentra un termómetro de neón. Por desgracia, este mecanismo tan curioso  se encontraba averiado.
La chica del tiempo


   Saliendo por el lado derecho del Ayuntamiento, se sitúa la estatua del conocido literato danés Hans Cristian Andersen, en su mano derecha sujeta un libro, mientras que en la izquierda porta un bastón. Después de haber explorado todos los centros de interés de la plaza, continuámos nuestro paseo.

Ali con Hans Cristian Andersen



    Nos dirigimos posteriormente por la calle Stroget, peatonal y sinuosa, siempre animada, es la arteria más popular y comercial de la capital, enlazando cinco calles diferentes. En ella, además de restaurantes y galerías de arte, tienen sus tiendas las firmas más prestigiosas.

La calle Stroget


Ali en la Plaza Nyrtov
   Llegamos a la Plaza Nytorv, una de las más concurridas de la ciudad, con bonitos edificios que rodean la plaza y con numerosos cafés y restaurantes con terrazas. Nos llamó la atención algo que nunca habíamos visto en ningún sitio durante los meses de estío y fue que en las sillas de las terrazas dispusieran de mantas polares. Más tarde, al caer alguna gota de lluvia y enfriar el tiempo, vimos como algunas personas hicieron buen uso de ellas.

Mesa con manta polar preparada para los veranos daneses

Ambiente en la plaza


   Adyacente a Nytorv nos encontramos con la plaza más antigua de la capital, Gammel Torv, presidida por su hermosa fuente y con un bello entorno de edificios.


En la Plaza Gammel Torv



   Nos dirigimos posteriormente hasta la Catedral luterana, el edificio exteriormente carece de interés. No pudimos visitar su interior al estar el templo cerrado.Comenzaron a caer las primeras gotas de lluvia, mientras nosotros  retomamos la calle Stroget y nos dirigimos  por la Hojbro Plads camino de los canales.

La catedral luterana


   La zona de los Canales está en un bello entorno, con encantadoras plazitas, puentes y edificios señoriales, entre los que destacan el Christiansborg Palace, antigua fortaleza que sufrió hasta tres grandes incendios por lo que no queda nada de su pasado. En 1928 se erigió el edificio actual de estilo rococó. Destaca su torre que es la más alta de Copenhague. Dentro del conjunto se encuentran el Parlamento, las Salas de Recepción Real y la Capilla.

Ali con vistas a los canales


Ambiente en los canales

El Cristianborg



    Muy cerca se halla uno de las construcciones más originales de la ciudad, la Antigua Bolsa, donde llama la atención su aguja, formada por las colas de cuatro dragones entrelazadas en espiral. El edificio data del siglo XVI.

La antigua Bolsa


    Nos dirigimos por Holmens Kanal hasta llegar al Teatro Real, este edificio se abrió al público en 1748, de su fachada cabe destacar las esculturas que coronan el tejado.

El Teatro Real


Canal Nyhavn
    Posteriormente, nos encaminamos a una de las joyas de la ciudad y que sin duda es la imagen más conocida de la ciudad después de la Sirenita , el Canal Nyhavn, de trescientos metros de largo era hasta hace un siglo una zona portuaria frecuentada sólo por marineros. Hoy además de las casas de mercaderes y almacenes portuarios es una atractiva área de ocio, con veleros, oficinas y numerosos restaurantes y cafés con terrazas de coloridas fachadas. A esas horas de la tarde estaba abarrotado de gente y con un gran ambiente.

En el Canal Nyhavn

Veleros y coloridas casas en el canal

Vaya vistas !!

Canal Nyhavn


   Caminando por el agradable paseo del puerto, está la Nueva Ópera, diseñada por Henning Larsen e inaugurada en 2005, está situada sobre una isla frente al canal Inderhavn, es el gran teatro lírico de la ciudad. Se ha convertido en uno de los símbolos de Copenhague por su fachada de cristal y por su situación sobre una isla.
La Ópera


  Más adelante se encuentra el Amalienborg Castle, la Residencia Real, fue diseñado por el arquitecto real Nicolai Eigtved en el siglo XVIII. El complejo cuenta con cuatro edificios diseñados en estilo rococó. Cuando lo visitamos pudimos presenciar a la guardia real con sus característicos gorros de piel de oso y que para nosotros fue el momento divertido de la tarde, viendo cómo desfilaban  y realizaban sus maniobras rutinarias.
Ali en la Residencia Real
La guardia real



    Continuamos caminando hasta llegar al Parque Kastellet diseñado en el siglo XIX ocupa los terrenos de la antigua ciudadela, construída en 1626 para defenderse de los suecos. esta fortificación ha sido testigo de las diferentes guerras en las que ha tomado parte Dinamarca a lo largo de su historia, durante años estuvo abandonada y también fue utilizada como prisión. Hoy en día es un agradable parque con jardines, lagos y bosquecillos y donde los daneses vienen a pasear o a realizar un picnic. Dentro del parque destacan también la Iglesia anglicana de San Alban y la fuente de Gefion.
En el Parque Kastellet al fondo la Iglesia  San Alban


   Dentro del Parque Kastellet, mirando al puerto y situada sobre una roca está la mundialmente conocida escultura de la Sirenita, fue esculpida por Edvard Eriksen en 1913 basándose en la obra literaria de Hans Cristian Andersen. A pesar de su aparente pequeño tamaño, pesa ciento setenta y cinco kilos y mide 1 metro veinticinco centímetros. Como es de suponer, es díficil encontrar un hueco para poder fotografiarla o disfrutar en relativa soledad de su presencia.

La sirenita descansa sobre una roca


   Ya sin tiempo para más, había que estar en el barco a las ocho y media, tomamos el camino hacia el barco, que nos llevó andando tres cuartos de hora.
De noche y antes de la cena, asistimos en el teatro del barco al mónologo de humor de Pedro Lamas, nos reímos de lo lindo con su espectáculo, y sería uno de los que más nos gustaría a lo largo de toda la semana. Ya en la cena conocimos a nuestros compañeros de mesa, la pareja catalana Irene y Marc, con la que conectamos rápidamente. Así finalizamos nuestro primer día a bordo, ya camino de Oslo.

8 comentarios:

  1. Hola Victor!Ya estaba impaciente esperando por tu relato.Como siempre ¡Genial!.
    ¡Qué buena pinta tiene este crucero!Es uno de mis próximos objetivos,aunque por fechas no me encaja muy bien ,pero el año que viene intentaré hacer un esfuerzo y buscar una semanita para hacerlo.
    Ya me dirás que tal con Iberocruceros.Mi experiencia con ellos fue muy buena.Trabajan muy parecido a Pullmantur .
    Los elefantes que aparecen en las fotos es una exposición en la calle con la que coincidí en Amsterdam hace dos años y que a Alba y Carla (mis niñas ,hija y sobrina) les encantó.Se sacaron fotos con todos .Estaban ubicadas en los alrededores de la casa de Ana Frank.
    Bueno Victor sigue contando que me muero de ganas de ver más.Un besote

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  2. ¡¡Hola chicos!! ¡Que buen comienzo!
    Me han parecido preciosas las coloridas casitas en los márgenes del canal y muy curioso lo de las mantas polares en los bares y la chica del tiempo...
    Un saludo ;)

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  3. No puedo decir otra cosa que Helena... Las casas del canal son preciosas, muy representativas y me han recordado mucho a Bergen, al igual que lo ha hecho la Opera con su homónima en Oslo, tan moderna... hehe

    Venga! Espero los siguientes relatos con muchas, muchas ganas!

    PD. Lo de las mantas en los bares lo vi también en Estocolmo, aunque allí, estábamos a -15ºC hehe

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  4. Me encantan esas casitas de colores al lado del canal y espero con ganas tus relatos del Grand Mistral, que me trae buenos recuerdos de mi paso por el Grand Holiday, jeje

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  5. Hola,

    Gracias por los comentarios !!

    Pury, el crucero estuvo chulo sobre todo por los paisajes de postal que vas viendo desde cubierta mientras navegas en el barco y la ruta que hace.

    Helena, las casitas en el canal Nyhavn eran preciosas, lo de las terrazas con mantas polares en pleno verano, un puntazo...jeje

    Blai, nos gustó mucho la Plaza del Ayuntamiento, el canal Nyhavn y el entorno de la Ópera con la Sirenita.

    Artabria, también en los Fiordos vas a ver casas típicas de madera de diferentes colores, también muy bonitas.

    Saludos.

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  6. Veo que le habéis cogido gusto a los cruceros. Éste en concreto debe ser muy bonito, porqué tal como comentas, los paisajes deben ser magníficos.
    No conozco Noruega, ni Dinamarca y prácticamente nada de Suecia, por lo que vuestros relatos nos serán muy útiles(como ha sido el de Atenas)el día que nos decidamos a ir.
    Un abrazo

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  7. Copenhague es una ciudad que está dentro de mis destinos de futuro y la verdad, creo que por lo que cuentas y se ve en las fotos tiene que ser preciosa, seguiré atenta de tus pasos por el Norte y me voy apuntando cosillas por si alguna vez puedo viajar para allá. ;-)

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  8. Hola,

    Gracias por los comentarios.

    María Teresa, sí que nos gustó el crucero, sobre todo por los paisajes de postal que vimos mientras navegábamos.

    Babyboom, Copenhague merece una escapada, tiene zonas muy bonitas, desde el Ayuntamiento hasta los canales, pero es una ciudad muy cara.

    Un abrazo.

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